PROYECTOS

NHOMA ESTUDIO. CASA MARA

NhOMA Estudio ha reformado esta vivienda valenciana con un diseño moderno que aprovecha toda la luz natural y una distribución ajustada a sus nuevos habitantes.

CASA MARA Autor: NHOMA ESTUDIO. Constructor: CONSTRUCCIONES BENIMAQUIA 4. Localización: VALENCIA. Superficie: 158 m2. Realización: 2023. Fotografía: OLEH KARDASH HORLAY.

Concheta Romaní y Carolina Tarazona, de NhOMA Estudio, son las autoras de la transformación de esta vivienda, situada en un edificio de 1930 construido en el centro de Valencia, en otra de diseño moderno, luminosa y con una distribución acorde a las necesidades de sus actuales propietarios, para los que el estudio ya había trabajado con anterioridad. «Con una planta originalmente muy compartimentada y diferentes usos, la casa tenía una cocina situada junto a la entrada, cerrada y sin conexión con el comedor», cuentan las autoras, que, para aprovechar al máximo la luz natural, optaron por ubicar la zona de día y los dormitorios en fachada, y abrir las zonas húmedas hacia el patio de luces. «Nos dimos cuenta de que, al ser un edificio en chaflán, podíamos aprovechar la luz de las diferentes orientaciones para ganar mayor iluminación en la cocina y el salón-comedor, y optamos por situar la zona de día en este espacio tan especial, a pesar de su posición más alejada del acceso», añaden.
La decisión de priorizar la luz natural y destinar el chaflán al espacio diáfano del estar-comedor-cocina invierte la distribución convencional, que normalmente sitúa las áreas comunes y más vivideras junto a la entrada, y la zona de noche más retirada, para garantizar su intimidad. Aquí, en cambio, los dormitorios se colocan junto a la entrada, tras atravesar una imponente puerta restaurada que busca conservar la esencia de la casa y transmitir, desde un primer momento, su atmósfera señorial original. A mitad de recorrido, el pasillo deja entrever al salón, a través de una ligera estantería de madera abierta a dos caras, que permite que la luz natural contrarreste la oscuridad propia de los largos corredores de las viviendas antiguas. Al fondo, un arco de ladrillo macizo visto aporta calidez y da paso a un espacio compartido por la zona de día, donde la geometría quebrada permite mantener sus usos independientes y, al mismo tiempo, conectados.