Arquitecto y diseñador, Tito Pérez Mora desarrolla una intensa actividad artística que le permite explorar el tiempo, la materia, la fugacidad y la memoria desde perspectivas poéticas y filosóficas.

Conocí a Vicente Pérez Mora, Tito, en 1996, en primero de Arquitectura. Era ya sabio y disciplinado, introspectivo y curioso, con tierna avidez por el conocimiento. Era ese modelo ideal de alumno permeable que en el aula reconforta y anuncia al profesional extraordinario. Ahora, es profesor en diseño y, sobre todo, artista plástico, reconocido por los coleccionistas en una docena de intervenciones artísticas. Antes de clausurar la etapa laboral que compaginó con arquitectura, ideó locales y viviendas. De sus cualidades es ejemplo la extremada delicadeza de su propia casa, en Madrid, a la que me invita para celebrar nuestra tertulia, larga, amena y emocionada.
Una explosión blanca de luz natural reflejada, radiante, palpable y densamente condensada, me sale al encuentro al ser abierta la puerta por Tito Pérez Mora, que surge flotando a contraluz. Casi terapéutico y en paz contagiosa, el brillante caudal embellece y diluye cuanto envuelve, en una atmósfera evocadora de la luz nórdica que disfrutó durante su intervención 1/8 (2015) en las islas Svalvard. Es un espacio continuo, equilibrado en las distancias, repartido con habilidad de escenógrafo en ambientes contiguos, colonizados, aquí y allá, por muebles y enseres necesarios, que se adivinan elegidos por su armonía y carácter esencial. La claridad colorea acentos verdes, rosas, negros, sobre el fondo general, también blanco, de la pintura.

Mercedes Peláez  ARKslowww arkslowww.com

Fotos: Mercedes Peláez  ARKslowww arkslowww.com, Tito Pérez Mora titoperezmora.com, TWIN Gallery, Madrid twingallery.es

REPORTAJE COMPLETO EN DISEÑO INTERIOR  323