DISEÑO
AESOP, MILAN DESIGN WEEK
El arquitecto Nicolas Schuybroek ha creado la instalación de AESOP en Milán, una tienda construida con 6.000 jabones inspirada en los diseños de Superstudo.
La marca australiana Aesop se ha convertido en un referente por el cuidado diseño de sus espacios, además de por la gran calidad de sus productos de higiene y cosmética, veganos y obtenidos éticamente. En colaboración con arquitectos de cada país –en España han trabajado con Barozzi Veiga, Mesura, Ciszak Dalmas y Matteo Ferrari–, sus tiendas muestran un interiorismo depurado e innovador, coherente con los valores de naturalidad y simplicidad de la marca.
Para su participación en la reciente Design Week de Milán, Aesop decidió transformar su nuevo local en Piazza Cordusio en una instalación sensorial, titulada Form follows formulation y diseñada por Nicolas Schuybroek. Siguiendo una lógica de formulación que es el eje en la filosofía de la firma, el arquitecto belga creó una escenografía cuya estructura surge de la superposición de bloques de jabón y está inspirada en el movimiento Arte Povera de finales de los 60 y 70, que tuvo en Milán uno de sus epicentros. “Este movimiento ha inspirado mi práctica durante muchos años y ahora ha sido la base de este proyecto para Aesop, que es conocido por su packaging minimalista. Restringir la materialidad a algo tan simple como una barra de jabón resuena con los principios del movimiento, mientras también hace eco de las icónicas estructuras de cuadrícula monocromáticas de Superstudio de los 70”, dice Schuybroek. El proyecto reviste todo el interior del local con un trasdosado de jabones cuya cuadrícula recuerda a la de los azulejos. Las pastillas se soportaban por una delgada estructura de madera fácilmente desmontable y reutilizable. En algunas de las paredes se crearon pequeñas cavidades a modo de hornacinas donde se mostraban, como si fueran joyas, los productos de la marca. En el centro de la sala, una isla se convirtió en camilla de tratamientos, a modo de performance, durante los días que duró la exposición. Al fondo del local, una cortina traslúcida daba acceso al ‘laboratorio’ donde el personal especializado ofrecía asesoramiento sobre la gama de productos Aesop. Al impacto visual de la bella instalación se sumaba la experiencia del delicado perfume de los jabones, un efecto que se incorporaba al interiorismo y multiplicaba la experiencia sensorial.
REPORTAJE COMPLETO EN DISEÑO INTERIOR 373