Tras tres años de minuciosa restauración, la primera vivienda proyectada por Gaudí abre sus puertas al público convertida en una atípica casa-museo donde contemplación y reflexión van de la mano. Considerada una obra-manifiesto de su autor y bandera de su libertad estilística, en 2005 fue declarada Patrimonio de la Humanidad.

Un joven Gaudí de 31 años proyectó esta vivienda de vacaciones en la villa de Gràcia, por entonces a las afueras de Barcelona, para el agente de cambio y bolsa Manel Vicens i Montaner. Corría 1883 y se trataba de su primer proyecto en la ciudad; una oportunidad única para desplegar su potencial creativo y su extraordinaria libertad estilística. Innovadora y original, completamente diferente de lo que se había construido hasta entonces en Cataluña, se trata de una de las primeras obras maestras del modernismo y un hito imprescindible para entender la arquitectura posterior de su autor. Estructurada en cuatro niveles: el sótano como el almacén; la planta baja para zona de estar, comedor y cocina; la primera, para dormitorios; y vivienda de servicio en el bajocubierta, la casa disfrutaba de una privilegiada orientación y manifestaba una singular relación con la naturaleza, que se refleja especialmente en la tribuna de la planta baja, pero también en todos los elementos ornamentales, tanto del interior como del exterior.

FICHA TÉCNICA

Proyecto: Rehabilitación de la Casa Vicens casavicens.org/

Carrer des Carolines, 20. Barcelona

Autor: Lapeña-Torres Arquitectes / David García

Fotos: Pol Viladoms

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